Rico asusta a los más confiados
De acuerdo con la última encuesta de intención de voto de candidatos para la Alcaldía de Medellín realizada por la Fundación Aldea Global, Juan Carlos Vélez Uribe, Federico Gutiérrez Zuluaga y Gabriel Jaime Rico Betancur estarían con las mismas garantías de ganar.
La razón es que Juan Carlos Vélez Uribe aunque sigue liderando las preferencias con un 27.31%, tiene muy cerca a Gabriel Jaime Rico Betancur con 24.41%, y a Federico Gutiérrez Zuluaga con 19.18%. Muy distante está Alonso Salazar Jaramillo con 6.28%, quien sale de la pelea.
Si hacemos cálculos electorales, Vélez Uribe tiene un case de unos 180 mil votos en Medellín de acuerdo con los resultados de Congreso, que podría aumentar con las alianzas de otros matices políticos y empresarios logrados en los últimos días.
Gutiérrez Zuluaga tiene un case de más de 100 mil votos obtenido en 2011 cuando aspiró a la Alcaldía por la U, proceso que ha fortalecido en los últimos años con la reciente recolección de firmas, el apoyo de empresarios como Ricardo Sierra y la llegada del ex candidato liberal Eugenio Prieto Soto con todo su equipo.
La encuesta de la Fundación Aldea Global nos muestra que Rico Betancur comenzó a subir porque la maquinaria conformada por concejales, diputados y congresistas se comprometió cuando vio que las firmas no eran suficientes.
Los empresarios que estaban dudosos también se montaron en la campaña y ahora Rico Betancur espera dar una sorpresa el próximo domingo en una contienda que no es clara ante tantos resultados de encuestas.
El líder conservador Carlos Mario Montoya Serna asegura que si la maquinaria que está con Rico Betancur se esfuerza así sea al 50%, con toda seguridad podría aportar más de 100 mil votos, y el resto de la tarea le toca al candidato con el trabajo que ha hecho en la ciudad durante lo que va corrido del año.
Los tres candidatos tienen todos los ingredientes para una interesante contienda: hojas de vida, reconocimiento, estructura y trabajo. Creemos que el voto de opinión jugará un papel importante como en otros años, pese a los tropiezos que generó el Consejo Nacional Electoral con la anulación de muchas cédulas inscritas por presunta trashumancia electoral.
