CAMPAÑA PRESIDENCIAL SEGUIRÁ EN SUSPENSO MIENTRAS SE DEFINE EL FUTURO DE MIGUEL URIBE TURBAY
Aunque las encuestas muestren algunos posibles favoritos, la realidad es que el desenlace de la situación de salud de Miguel Uribe Turbay, será relevante.
Mientras no se conozca el desenlace de la salud del precandidato presidencial, Miguel Uribe Turbay, la campaña seguirá medio en suspenso, al menos por los lados de la derecha, aunque aspirantes como Vicky Dávila saquen provecho del asunto para hacer bulla.
Para la derecha es algo complejo continuar la campaña como si nada, mientras Uribe Turbay, sigue debatiéndose entre la vida y la muerte, y transcurridos varios días no hay certezas claras sobre los motivos y los autores del crimen.
La izquierda, en voz de Armando Benedetti, ha sacado punta, al señalar que el atentado los afecta a ellos.
Más allá del suspenso que hay con el futuro de Uribe Turbay, hay que ser honestos, al precisar que el presidente del 2026 no puede ser cualquiera.
El país será entregado en unas condiciones similares a las de principios de 2000 cuando Andrés Pastrana prácticamente dejó a Colombia en manos de la guerrilla de las Farc y la zona de distención.
No podrá ser cualquiera quien gobierne. No podrá ser aquél o aquella de ese discurso de “poder militar” que solo le lucía a Uribe, o de izquierda incluyente que le sirvió a Gustavo Petro, para elegirse, pero no para cumplir.
Y si nos vamos al centro, tampoco es que haya mucha expectativa con un candidato tibio que crea que todo lo va a resolver con diálogo.
Complejo reto el que tenemos en Colombia para elegir a la persona adecuada, cuando vemos más de 80 nombres y poca claridad de un líder que concentre todo lo que necesitamos.
¡Necesitamos un milagro!
