EN PELEA POLÍTICA CONFUNDEN CONTRATOS ESTATALES QUE CUMPLEN REQUISITOS CON LOS QUE NO, Y QUEDAN MUY MAL
Polarización política ha llevado a seguidores de lado y lado a incurrir en errores para confundir a la gente.
Se ha vuelto común que seguidores de Daniel Quintero Calle; Gustavo Petro Urrego; y de Federico Gutiérrez Zuluaga y Álvaro Uribe Vélez, se enfrenten sin argumentos (en algunas ocasiones) tratando de confundir a los ciudadanos de a pie.
Durante la administración de Daniel Quintero Calle era frecuente que, concejales del Centro Democrático, como Alfredo Ramos Maya, dieran a conocer los contratos de publicidad de medios que cumplían con los requisitos, como si se tratara de una práctica irregular.
Algo muy distinto, y que sí fue válido, fue la denuncia que se hizo sobre “medios fantasmas” con contratos elevados y sin el lleno de requisitos que una vez terminada esa administración desaparecieron del mapa.
Y ahora, lo propio, hacen seguidores de Daniel Quintero Calle, quienes publican los contratos que cumplen con requisitos de medios tradicionales, como si fueran ilegales. Sólo señalan que medios como la revista Semana y RCN reciben mucho. Pero eso lo han hecho todos los gobiernos. Contratan con quienes mejor se sienten y eso no es ilegal, así sea reprochable.
Recientemente también directores de medios nacionales pusieron el grito en el cielo porque el gobierno de Petro está trabajando con medios alternativos, como si los únicos que tuvieran derecho a pauta oficial fueran ellos. Eso tampoco es ilegal.
En la pelea que tienen los de izquierda con los de derecha, están metiendo en bulto a medios que hacen bien la tarea, con otros que probablemente no cumplen con los requisitos para ser contratados.
Deberían, si son serios en la discusión, denunciar puntualmente qué medios o “periodistas” no son aptos para la contratación en los planes de medios, pero no afectar el buen nombre de quienes cumplen el oficio de manera legal.
La contratación estatal tiene muchos filtros para establecer la idoneidad de los medios que son aptos para cumplir con el objeto esperado.
Quienes andan en esa pelea, creen que publicando listados de la plataforma del Secop de todos los medios contratados en el ámbito local, regional y nacional, están demostrando corrupción, y antes, por el contrario, quedan muy mal por el poco conocimiento legal de cómo funciona lo público.
De acuerdo con esos contradictores, los medios deberían trabajar gratis, pues quienes se prepararon para informar no tienen derecho a tener un sustento, que, entre otras cosas, el oficio de periodista es de los más mal pagos del país.