CONCEJAL GUERRA DICE QUE NO LE TIENE MIEDO A POPEYE Y A SU COLEGA MANUEL MORENO ZAPATA
El concejal de Medellín, Bernardo Alejandro Guerra Hoyos, increpó al concejal del Partido de la U, Manuel Alejandro Moreno Zapata, cuando le dijo que aquí algunos concejales pensaban que era un juego las supuestas amenazas de médicos del Hospital General, quienes estarían diciendo por whatsapp que había que conseguir a Popeye para asesinarlo.
Y le dijo a Moreno Zapata, pese a que no estaba en el recinto el miércoles 23 de mayo hacia las 11 de la mañana: “no le tengo miedo a usted ni a sus socios políticos y del Bajo Cauca. No le tengo miedo al Clan Rodríguez, que se iba a robar el concurso de Metrosalud para mandárselo a decir con usted. Inmaduro. Usted no merece ser concejal de la ciudad de Medellín. No le tengo miedo ni a usted ni a Popeye”.
Cuando Moreno Zapata fue enterado de las ofensas rápidamente ingresó al recinto para defenderse: “Ofrezco disculpas si no he estado a la altura de esta curul. Pero sí me ha caracterizado el don de ser persona. Puede que yo sea inmaduro pero no irresponsable e inquisidor concejal Guerra. Si merezco estar aquí no es su potestad suya, sino del pueblo que me eligió. Lo he respetado en todos sus debates. Que no comparta su estilo, irrespetuoso con quienes denuncia y sus compañeros, es otra cosa”.
Y agregó: “Esta es la tercera vez que me trata de irresponsable. Si son corruptos quienes me rodean denúncielos penalmente. Pero no acepto que me ofenda y al equipo de Germán Hoyos”.
“Usted se las tira de muy bravito porque se la monta al que le da la gana. A mí no. No tiene nada qué decir de mí, ni de mi equipo. Usted trabaja contra la corrupción pero todos lo hacemos”, aseveró.
El Concejal continuó diciendo: “Vamos a ver cuántos votos saca usted el año entrante y cuántos yo. Que quede constancia señora Presidenta del Concejo, el irrespeto de este señor con los colegas”.
Moreno Zapata sostuvo que: “No es la manera de ser noticia y hacerse notar concejal Guerra parándose en los otros. Suélteme a recreo. Si quiere denunciarme hágalo que soy abogado y no le tengo miedo”.
Lo más grave del episodio es que se ha vuelto repetitivo y los últimos presidentes del Concejo no han sido capaces de tomar cartas en el asunto y aplicar el reglamento cuando surgen ofensas entre los concejales.
