Recovecos cortos

ALCALDE DE GIRARDOTA, DIEGO AGUDELO: ¿HACIENDO POLÍTICA?

Por Juan Carlos Hurtado Ochoa

De acuerdo con un discurso del alcalde de Girardota, Diego Agudelo, durante la conmemoración de los 188 años de la población, hay quienes consideran que podría estar haciendo política (lo cual está prohibido) al resaltar la labor de la diputada liberal María Eugenia Lopera y del senador conservador Carlos Andrés Trujillo.

En la intervención que hizo a través de su cuenta de Facebook, la cual duró una hora, entre el minuto 50 y 55, el mandatario se despachó en elogios hacia la diputada y aspirante a la Cámara, María Eugenia Lopera, del senador Julián Bedoya Pulgarín, al señalar que durante la pandemia les dio 100 ayudas para la gente. Que su presencia en el evento (que a muchos causó curiosidad) era desinteresada.

De la misma manera sostuvo que el senador Carlos Andrés Trujillo hizo posible la terminación del hospital, mejorar la fuerza pública, conseguir 10 mil millones de pesos para un trapiche comunitario que le servirá a los campesinos, que estará agradecido con él durante el resto de su vida, y donde esté, allí estará acompañándolo.

En los mentideros se dice que los senadores Carlos Andrés Trujillo y Julián Bedoya Pulgarín han estado haciendo trabajo conjunto en municipios del Valle de Aburrá como Itagüí y La  Estrella, que la escogencia del gerente de Metroplús, Jaime Alberto Garzón Araque, fue producto de acuerdos, y seguirán trabajando para crecer políticamente.

En cuanto a si el alcalde estaría participando en política se abre un debate interesante. Diputados y senadores se supone que son elegidos para que consigan recursos y proyectos para las poblaciones. Es lógico y legal, que un mandatario dé a conocer cómo se hacen las obras y de dónde sale la financiación. Ahora, que Diego Agudelo, tenga afinidad política con el senador Trujillo y la diputada Lopera, es otro asunto. Lo complejo es probar que está participando en política y esté alentando a  los habitantes para que voten por ellos en el 2022.

Además hoy ostentan curules. No actúan como candidatos (aunque subliminalmente sí)  y por ello queda muy “cuellón” denunciar al mandario de Girardota sobre posible participación en política.

Para evitar este tipo de confusiones sería pertinente que aprueben proyecto de Ley que permita que los servidores públicos participen en política y así “quitarnos las máscaras” como sucede en Estados Unidos donde la democracia funcinona relativamente bien.

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