A GERMÁN VARGAS LLERAS NO LE LUCE EXAGERAR COMO ABELARDO DE LA ESPRIELLA, VICKY DÁVILA Y SANTIAGO BOTERO
Cuando Germán Vargas Lleras lanza mensajes de pánico sin fundamento, pierde el garbo de estadista.
El candidato presidencial, Germán Vargas Lleras, ha lanzado varias alarmas que no le han resultado, con el ánimo de llamar la atención, perdiendo de paso el garbo de estadista construido con tantos años en lo público y político.
Hace algunos meses aseguró que Gustavo Petro iba a reformar la Constitución para reelegirse y eso no sucedió. Y la última alarma de pánico la hizo con la elección de magistrado en la Corte Constitucional señalando a María Patricia Balanta como la fija de Petro para tomarse el órgano a su favor.
Y, como lo he venido advirtiendo, Petro se quitó la máscara y abiertamente señala que nada más le importa que hacerse a las mayorías de la Corte Constitucional. Si esto ocurre, estaremos sometidos a este yugo, mínimo, durante los próximos seis años. https://t.co/btyqfCQvw9
— Germán Vargas Lleras (@German_Vargas) September 2, 2025
Eso no sucedió. Eligieron a Carlos Camargo, y Vargas Lleras quedó, qué pena decirlo, como “la chismosa” del barrio.
Según Vargas Lleras había que temerle a Petro (pese a no contar con las mayorías) cuando el peligro está en congresistas que se hacen pasar como oposición, y bajo cuerda reciben dádivas como se presume de Iván Name y otros.
Vargas Lleras no necesita hacer shows mediáticos como Abelardo de la Espriella, Vicky Dávila y Santiago Botero. Tiene hoja de vida suficiente para ser un buen candidato y lanzando discursos amarillistas antes pierde punto, midiéndose con aspirantes escandalosos.
